La historia del cóctel Negroni nos traslada a la ciudad de Florencia a principios del siglo XX, una hermosa ciudad que era conocida como la ciudad de los artistas del Renacimiento, por los grandes músicos, matemáticos y pintores que en ella nacieron y por todos aquellos genios y aristócratas que por ella pasaron.
Uno de estos aristócratas era el conde italiano Camillo Negroni, un asiduo tertuliano del café Casoni, una especie de tienda en el corazón de Florencia donde se vendía tabaco, perfumes, antigüedades, bebidas y snacks (ahora es el famoso caffé Giacosa de Roberto Cavalli).
Corría el año 1919 cuando el conde Camillo Negroni cansado de beber siempre lo mismo, el famoso y estupendo cóctel Americano que por aquel entonces estaba de moda, pidió al Barman Fosco Scarselli que le «fortaleciera» el cóctel sustituyendo la soda por ginebra. Fosco también sustituyó la rodaja de limón, característica del Americano, por una rodaja de naranja para distinguir una bebida de la otra, de esta manera nació el extraordinario cóctel Negroni.
No es de extrañar que el conde Camillo Negroni pidiera que le añadieran más alcohol al cóctel Americano ya que el se jactaba de presumir de ser un personaje bastante duro y de haberse ganado la vida durante bastante tiempo como vaquero de rodeo en los Estados Unidos.
La mayoría de bartenders coinciden en que el cóctel Negroni se debe preparar en el mismo vaso donde se va a servir, usando un par de cubitos de hielo bien congelados y jamás usar hielo picado ni hielo medio deshecho para que el cóctel no se nos quede aguado, por este mismo motivo es conveniente que tengamos los ingredientes previamente fríos en la nevera para que al incorporarlos al vaso.
INGREDIENTES
3 cl de Ginebra
3 cl de Campari
3 cl de Vermut Rojo Dulce
MÉTODO
Vierta todos los ingredientes directamente en un vaso antiguo frío lleno de hielo, revuelva suavemente.
DECORACIÓN
Adorne con un twist o media rodaja de naranja.